Este 3 de junio se cumple una década del primer grito colectivo que estremeció a la Argentina y encendió una llama de lucha que no ha dejado de arder: Ni Una Menos. A diez años de aquella histórica movilización de 2015, las calles de todo el país volverán a llenarse de voces que exigen justicia, igualdad y el fin de las violencias de género. En Mendoza, la concentración será a las 18:30 en kilómetro cero.
La Asamblea Ni Una Menos Mendoza convoca a marchar vestidas de negro, con flores y velas para construir un altar en memoria de las víctimas. La convocatoria, cargada de simbolismo, apunta a mantener viva la memoria colectiva, pero también a renovar el reclamo ante la persistencia de la violencia machista y la inacción o insuficiencia de las respuestas estatales.
En diálogo con este medio, Araceli Pelegrina, integrante de la Asamblea Ni Una Menos Mendoza, expresó:
“10 años pidiendo justicia en la calle, una década en la calle pidiendo que dejen de matarnos. Una década diciendo que el Estado es responsable, que sin presupuesto y políticas de cuidado no hay alternativa al machismo violento.”
Un grito que se volvió regional
Lo que nació como una reacción al femicidio de Chiara Páez, una adolescente de 14 años asesinada por su pareja en Santa Fe en mayo de 2015, se convirtió en uno de los movimientos feministas más potentes de América Latina. En pocos días, y gracias al impulso de periodistas, escritoras, artistas y organizaciones sociales, miles de personas salieron a las calles en distintas ciudades del país bajo la consigna Ni Una Menos. Desde entonces, la fecha quedó grabada en el calendario feminista como un día de lucha y memoria .
A lo largo de estos diez años, la movilización logró instalar con fuerza temas antes silenciados: los femicidios, la violencia institucional, el derecho al aborto legal, la brecha salarial, el trabajo no remunerado y el rol del Estado como garante —o como ausente— de políticas de prevención y protección.
La situación en Mendoza
Según datos del Observatorio de Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá), en lo que va del 2025 ya se han registrado 93 femicidios a nivel nacional, lo que equivale a una mujer asesinada cada 31 horas . Mendoza no ha estado exenta de esta problemática. La provincia ha sido escenario de casos resonantes y de reclamos por la falta de respuestas adecuadas del Poder Judicial y del sistema de protección a víctimas. Si bien existen oficinas de violencia de género y programas provinciales, las organizaciones denuncian que no hay recursos suficientes y que muchas veces la asistencia llega tarde.
“Una sociedad con igualdad es una sociedad que no mata a sus mujeres y a sus niñas, es una sociedad donde todas las voces pueden ser escuchadas”, remarcó Pelegrina, e invitó a sumarse a la marcha de este 3 de junio.